El Tribunal Penal de El Cairo condenó hoy al ex mandatario del país, Mohamed Mursi a una nueva cadena perpetua en un caso de espionaje en el que otros seis presuntos culpables, entre ellos tres periodistas, fueron sentenciados a ser ejecutados en la horca.
La institución condenó también a quince años de cárcel a Mursi, a los tres reporteros y a los otros siete acusados en otro fallo relacionado con el mismo caso.
En él, el ex presidente egipcio, los tres periodistas y otras siete personas se encuentran acusadas de hacerse con archivos relacionados con la seguridad del Estado y dárselos a las autoridades de Catar.
Junto a Mursi, fueron condenados a cadena perpetua, que en Egipto corresponde a 25 años, el director de la oficina del ex presidente, Ahmed Abdelati, y el en su momento secretario de Presidencia, Amin al Sayarfi.
Se trata de la segunda cadena perpetua a la que es condenado el antiguo mandatario.
Además, el ex presidente fue castigado con la pena capital el 16 de junio de 2015 por urdir su huida de una prisión de las afueras de El Cairo durante la revolución de 2011.
Ese mismo día, Mursi y otros 16 islamistas fueron condenados a cadena perpetua acusados también de espionaje y de colaborar con organizaciones extranjeras para planear ataques en Egipto, entre ellas el movimiento palestino Hamás.
Asimismo, una pena de 20 años de cárcel pesa sobre el ex presidente por su relación en la muerte de manifestantes en El Cairo durante unos disturbios en 2012.
Los comunicadores sentenciados a muerte en rebeldía son el antiguo director de informativos de Al Yazira en árabe Ibrahim Helal, el periodista jordano de Al Yazira Alaa Omar Sablan y la reportera de la agencia Rassd -simpatizante de los Hermanos Musulmanes- Asmaa al Jatib.
Los seis condenados a la pena capital en este juicio, que ha tenido 99 sesiones, ya fueron sentenciados el pasado 7 de mayo por la justicia egipcia, que mandó su decisión al muftí Shauqi Alam, máxima autoridad religiosa musulmana en Egipto, que ratificó la condena.
“Lo que más me molestó es que me acusaran a mí y a otros de traición, cuando la verdadera traición a la patria está en el dictado de estos fallos; la causa y las pruebas están basadas en investigaciones de agentes de la seguridad del Estado, que se negaron a decir cuáles fueron sus fuentes”, indicó Helal en declaraciones a Al Yazira.
El canal catarí ha sido vetado en Egipto a causa de la tensa relación entre Doha y El Cairo, ya que Catar fue uno de los principales valedores de Mursi y fue muy crítico con las autoridades que surgieron tras su derrocamiento en julio de 2013.
A partir del golpe de Estado militar encabezado por el actual presidente, el mariscal Abdelfatah al Sisi, las nuevas autoridades han hecho una dura campaña de represión contra los Hermanos Musulmanes, declarados organización terrorista, así como contra toda la disidencia política en la nación .
